Crónica del ZLive! 2019 – Intro / Comentario general
Seguimos contando cómo han sido los festivales veraniegos en nuestro país (y fuera también) y es el turno de arrancar con las crónicas del Z!Live RockFest. Como hemos hecho con el resto, comenzamos con un comentario general a modo de intro y sensaciones:
Z! Live – 14-15 Junio 2019 – Zamora (España)
La cuarta edición del festival Z!Live se tornaba como una propuesta muy interesante en el circuito de festivales veraniegos de Metal en España. De hecho era este fin de semana el que iniciaba temporada, si bien en los meses previos ya habíamos contado con algunos eventos interesantes como el Galia Metal Fest en Pozal de Gallinas (Valladolid) el pasado abril, o el propio Viña Rock y Extremúsica, y también el Garage Sound / Mulafest aunque no en tesituras netamente metaleras. Hay que reseñar, como os contamos más abajo, que competía ese fin de semana con el Rock The Coast malagueño (al que también asistimos como os contamos en la web hace unos días), y que afortunadamente en ambos casos hubo buena entrada y resultado positivo (cada uno en su estilo y dimensión, por supuesto).
Ya el año pasado el Z! Live había recibido un fuerte espaldarazo con la inclusión de bandas de primerísima fila internacional, como ORPHANED LAND, RHAPSODY OF FIRE o los holandeses EPICA, en su cartel. En la presente edición subía la apuesta con un buen puñado de bandas señeras del Metal, como THERION, KAMELOT, GAMMA RAY, SODOM, PRIMAL FEAR o TIERRA SANTA entre otras.
Bien es cierto que la “contraprogramación” en un mismo fin de semana de mediados de junio entre este Z! Live y el flamante Rock The Coast en Fuengirola (Málaga), una cita a priori más grande y repleta de rutilantes estrellas, introducía la sombra de una duda a propósito de cómo iba a resistir el festival zamorano la nueva competencia malagueña. Por último, los coletazos finales de la ciclogénesis explosiva que sacudió Iberia a principios de mes, unido al clima mediterráneo continentalizado de estepa propio de Zamora, también iba a tener su influencia directa en el festival. Pero de todo ello salió triunfante, y con nota.
Personalmente era la primera vez que asistía al Z! Live. Para los que nunca lo hayan hecho decirles que el evento se emplaza en el Auditorio Ruta de la Plata, en la orilla meridional del Duero, junto al campo de fútbol del Zamora y compartiendo instalaciones (como el aparcamiento) con éste. El Auditorio es un recinto más que digno, con unas gradas de hormigón descubiertas y una zona (cubierta, esta vez) de barra y unos numerosos baños. Al tratarse de una infraestructura estable y no de una equipación móvil, éstos son, en consecuencia, de lo mejorcito que hemos visto en los festivales españoles, algo naturalmente muy de agradecer.
Aparte del escenario Thunderbitch, esto es, el propio de tal recinto, este año se añadía otro más pequeño, bautizado como Red Mediaria Stage, en la entrada junto al aparcamiento. Con ello el festival se suma ya al clásico juego de contraposición entre escenarios a nivel de horarios y permite ahorrar tiempos muertos en los cambios de instrumental y atrezzo. Siguiendo una tendencia creciente que compartió con su competidor malagueño, este año fueron muy importantes dos elementos con los que vamos a convivir en el futuro inmediato:
Por un lado, el chip integrado en la pulsera del festival que funcionaba a modo de “monedero electrónico”, cargándose de saldo en puntos autorizados y eliminando así el dinero físico en el interior del recinto. Funcionó en general bien, a excepción de los “picos” o remanente de saldo al final del festival, que abrían la puerta a dejar cierto saldo sin gastar para aquéllos que no hubiesen planificado astutamente sus consumiciones.
Por otro lado, el empleo de vasos de plástico reciclables o retornables, serigrafiados, se está haciendo también popular, por las directrices antiplásticos de la U.E., en nuestras fiestas. Habiendo que abonar un euro para adquirirlos, que teóricamente era reintegrado al final del festival, la desagradable sorpresa vino cuando el último día se empezó a decir que solamente se devolvería un máximo de tres vasos por persona (algo absurdo, si lo que pretendes es que la gente te limpie el recinto de vasos y te los lleve a las barras para sacarse un dinerillo, como sucede desde hace muchos años en Wacken y muchos otros festivales europeos, incluyendo en menor medida nuestro querido Leyendas del Rock) y a partir de la 1:00 A.M.
Al preguntar dónde estaba escrito esto en la normativa del evento (quizás en alguna cláusula de algún pliego de condiciones, desde luego no en la web del evento) las explicaciones del personal del festival, fueron, siendo generoso, imprecisas e ignorantes de lo preguntado, cayendo incluso en la grosería. Parece que a los asistentes a eventos no nos queda otra que pagar religiosamente y no hacer preguntas incómodas. Aspectos que hay que mejorar para próximas ediciones sin duda…
Tirón de orejas a modo de crítica constructiva, al menos es nuestra intención, que esperamos que ayuden a solucionar problemas o incomodidades en ocasiones venideras. De todos modos, quizás el punto más flojo de la organización este año quizás fuese el de los puestos de comida y mercaderías. Las barras eran suficientes para saciar la sed, pero para comer dentro del festival (y en los alrededores, ocupados por el cementerio municipal y el campo de fútbol, pocos bares había a corta distancia) la única opción eran un par de Food-trucks. Sumadle un par (literalmente) de puestos de merch y eso era todo.
Detalles y «fallos» de una edición más grande este año (como por ejemplo que el escenario principal no estuviera techado / tapado, con el consiguiente problema, para las bandas, público… y fotógrafos, con las condiciones meteorológicas, especialmente sol y viento en este caso) que esperamos que siga creciendo y convirtiéndose poco a poco en otro de nuestros festivales de referencia a nivel de mediano aforo/tamaño.
En el siguiente artículo nos metemos ya a comentar los conciertos, actuaciones y crónicas en sí de las bandas del festival de esta edición de 2019 del festival. Pero primero ya sabéis que nos gusta dar unas primeras pinceladas de contexto, a modo de intro y comentario general y primeras impresiones de los festivales a los que asistimos.
Gracias al Z! Live por las facilidades, el trato y por conseguir sacar adelante una exitosa nueva edición del festival. Y vamos ya con las crónicas de las actuaciones de los dos días de festival en la segunda parte…
Texto: Saúl Martín González
Fotos: Boliche Angeles
¿Vemos el aftermovie oficial de la edición de este año?