GHOST: Semana Santa impía en Madrid

May 02, 2017 por Red Hard´n´Heavy en Avisos

GHOST + ZOMBI: “The ring” Wizink Center (Madrid, viernes 14 de abril de 2017)…

A priori un viernes de Semana Santa no es la mejor fecha en la capital para programar/ver un concierto de rock y heavy metal no masivo en Madrid. Aún así, la ocasión la pintaban calva, como se suele decir, pues no es lo mismo hacer coincidir con la Semana Santa en nuestro país a un grupo impío y 100% cercano a la imaginería religiosa que el hecho de que toque un grupo cualquiera.

De todos modos, pese a las buenas intenciones y elegir el calendario con cortaplumas, no funcionó. Cierto es que se agradeció poder ver en Madrid el show completo, que en Bilbao y Barna pasaron a salas menos grandes, y en un gran recinto como es el antiguo Palacio de los Deportes, versión reducida. Como digo, buena elección a priori y salto lógico después de reventar La Riviera la última vez pero quizás demasiado pretencioso… y como tal no fuimos más de 2000 personas las que nos acercamos a comer carne y beber vino y escuchar rock “satánico” esta noche.

Por otro lado, está claro que GHOST “ya no sorprende”… Lo entrecomillo porque es una afirmación tal vez osada, y más puesta en mi boca pecadora siendo gran fan del grupo y sobre todo de su descaro, soplo de aire fresco y a la vez rollo 100% vintage y de peli de terror de serie B. Me hace gracia cuando la gente les compara con grupos como MERCYFUL FATE / KING DIAMOND e incluso con BLACK SABBATH, de los que sin duda beben sin reparos ni disimulo… Pero casi nadie hace referencia a bandas / proyectos como GOBLIN, quien ponían las tétricas bandas sonoras de las películas de terror del maestro Dario Argento, o los veteranos MAGMA o incluso a sonoridades más cercanas a PENTAGRAM o a SAINT VITUS que a los maestros SABBATH y MERCYFUL FATE. De cualquier manera, loa y reverencia a Papa Emeritus y sus chicos (sean quienes sean, bajista femenina incluida, que la polémica reciente con los antiguos miembros aún sigue latente).

Volviendo al argumento, quizás no sorprende, ni siquiera escandaliza en estos tiempos, pero sí es 100% efectivo y un grupazo que suena totalmente hipnótico y majestuoso en directo. Lastima la maldita limitación de volumen en recintos de este tipo que hizo que los comienzos del concierto fueran dubitativos y que en ningún momento pudiéramos decir realmente aquello de que suena que atruena. De cualquier manera, la nueva formación es solvente al máximo y Papa Emeritus cada vez es mejor frontman y excelente maestro de ceremonias, muy metido en su papel, sin hablar en exceso y utilizando ese tono pagano y de eterno extranjero misterioso (¿de Transilvania?, por ejemplo). Que no canta mucho, cierto, pero ni falta que hace pues es gamberro pero elegante, provoca, es objeto de todas las miradas, se gusta y además está 100% en su papel en todo momento.

¿La banda?, nuevos músicos por completo pero musicazos. Mismos símbolos y personalidades pero sin alterar presencia misteriosa, de negro impoluto, jugando incluso en esto en los tonos de las guitarras (una blanca y una negra, que me juego mi cuello “cristiano” a que no es casual). Y los máscaras de “nameless ghouls” son sublimes: No ver, no hablar, no oír pero tocando como los ang… mismísimos demonios. Y me llamó mucho la atención la bajista, que sí, que es una chica, sin parar de moverse, de interactuar y de estar en todo momento en primera línea. Batería y teclado en dos tarimas elevadas y el escenario a dos alturas pero destacando sobre todo el gran telón de fondo a modo de vidrieras de catedral… por supuesto con motivos apócrifos y provocativos, que nunca falte la polémica y las ganas de provocar en el rock n´roll, por favor.

Misa negra, edulcorada quizás con respecto a lo que algunos se pensaban que iban a ver (esto es como los que aún piensan al ver fotos de KISS que van a ser una banda de metal extremo cuando obviamente no van por ahí los tiros, pues eso), que comenzaba directamente con la nueva “Square hammer”, sublime y que nos empieza a hacer entrar en éxtasis, y más siguiendo con uno de los ya clásicos del grupo como es “From the pinacle to the pit”. Primera charla previa a “Body and blood”, monjas sexys en escena mediante, y con Papa haciendo incidencia en que nadie en las primeras filas se propase con ellas cuando pasaran a hacernos comulgar, ¡bien por el comentario!… Más puntos álgidos con “Cirice” y la hímnica “Year zero”, con toda la cara coreando el sacramento satánico correspondiente.

Una pausa antes de seguir relatando de manera genérica el concierto, que no quiero ni me gusta llamar a esto «crónica» sin más… De nuevo más que peculiar la mezcla de público que aglutinan GHOST, desde “pijos” curiosos hasta blackmetaleros, y aún así me llama la atención que mueven a más roqueros que heavies, seguramente por el estilo musical que defienden en el fondo, y que gustan mucho a las chicas, lo que no deja de sorprenderme y como tal lo comento. Perfecto punto por ellos que, con una propuesta nada fácil de mover y vender, aunque atractiva, han conseguido aunar a muchos tipos de público y de todas las edades (por ejemplo en las primeras filas podíamos ver a un niño de unos 10 años con sus padres totalmente ataviado y pintado como un mini Papa Emeritus). ¡Bien por ellos!

Retomamos el show, ya con el traje de obispo en la sacristía y vestido el prota con elegante esmoquin de época, y seguían cayendo himnos apócrifos e irreventes como “Absolution” o la gran “Zombie queen”, uno de los temas que de hecho mejor mezclan su vena más popera, sí, y peliculera con el punto más cañero y metalero en guitarras y estribillo. Eso sí, iba a ser corto pues no llevábamos ni hora y veinte cuando se retiraron tras los acordes del megahit “Ritual”, su primer gran éxito y la canción que les puso en el mapa desde entonces hasta siempre. Y para rematar, y tras el discurso habitual del jefe sobre, en este caso, la Semana Santa (hubo varias bromas lógicas al respecto durante todo el show), y la alusión a que su último tema siempre va dedicado a las damas y al orgasmo femenino, nos dejaban un tanto fríos tras sólo hora y media pelada con “Monstrance clock”.

Buen concierto, sin duda, y una banda que son mucho más que imagen y pantomima, por si alguien aún lo duda (y eso que sigo pensando que su primer y tercer disco… y por lo que parece el cuarto también son mucho, mucho mejores que el segundo) y tienen un directo excelente. Ahora, no miento si digo que la efusividad y emoción de la primera y segunda vez ya no es igual. Personalmente me gustaron y sorprendieron mucho más en La Riviera hace año y medio que esta vez… y por supuesto más que el par de veces que les he visto en festivales, que no es su mejor baza ni de lejos. Concierto efectivo y mas que correcto, y con gran montaje y una bandaza sobre el escenario que hace su show, tocando 100% en directo, mejor que nadie… pero visto la primera vez el punto de sorpresa y emoción lógicamente disminuye.

Pueden ir en paz, feligreses, que la misa ha terminado.

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Por cierto, se habrán dado ustedes cuenta de que no he hablado de los teloneros, a propósito, y es que no sé si es correcto o adecuado hacerlo. Es lo que decían aquellos de que si lo que tienes que decir no es más bello que el silencio… Me explico: ¿alguna vez habéis imaginado una mezcla en directo de dos tipos de Pittsburg (EEUU), una batería y un bajo/teclado, tocando durante 45 minutos canciones instrumentales en una onda stoner / progresivo / metal / fusión / rock vintage / sludge?… Como se suele decir, seguramente el problema no eras tú, era yo (o la mayoría de nosotros, de los presentes), pero el puro fue soberano. No les quito méritos ni digo que sean malos, ¡Dio me libre!, porque no lo son, pero creo que la elección de los inefables GHOST en este caso no ha sido nada, pero que nada acertada para esta gira.

No sé, quizás en otro momento, en otro lugar, en otro tipo de evento, con otro público, a otra hora, con otro ánimo… pero vamos, no fui el único que tras escuchar dos o tres canciones diluyó totalmente la atención hasta que empezó GHOST. Para gustos los colores, como se suele decir, pero a veces prefiero sólo el blanco o el negro, que los colorines desdibujados o expuestos sobre el lienzo sin ton ni son a cubazos y/o a pinceladas enérgicas, no es lo mío… ni creo que lo de la mayoría de seguidores de GHOST que andábamos por allí tampoco, porque el comentario negativo y de aburrimiento supino fue más que generalizado.

Texto David Esquitino (david.esquitino@redhardnheavy.com)

Fotos: Manu Damea (de Barcelona)

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