Entrevista con Carlos Expósito (batería) de STRAVAGANZZA a punto de tocar en Madrid
Entrevista para STRAVAGANZZA a pocos días de su vuelta en Madrid y Barcelona:
A sólo un par de días de los conciertos de vuelta de STRAVAGANZZA en las dos principales ciudades de nuestro país, nos ponemos en contacto con el batería del grupo, Carlos Expósito para que nos cuenta muchas cosas de la actualidad, presente, futuro y, por supuesto también, pasado de los inclasificables madrileños.
Buenos días, Carlos (y compañía) y un placer saludaros y retomar el contacto con la banda después de tanto tiempo parados. ¿Cómo estáis, qué te apetece decirnos del momento y estado de la banda a punto de reaparecer en directo?
¡Muy buenas!… Pues las sensaciones en el campamento Strava son muy positivas. Estamos metidos de lleno en la recta final de la producción del concierto de Madrid, con los ensayos generales, vestuario, temas técnicos y demás. Está todo finalmente tomando forma y los ánimos están arriba.
Obviamente cada uno habéis seguido con vuestros proyectos pero Leo sobre todo ha dicho siempre que cuando fuera el momento y os apeteciera, STRAVAGANZZA volvería a la palestra. ¿Por qué ha sido o es ahora el momento?, ¿cómo ha sido la idea de volver, vaya?
Para que STRAVAGANZZA ocurra tiene que darse una serie de factores de toda clase. La inquietud artística y las ganas de vernos siempre han estado ahí, pero quizá faltaba tener la energía, las posibilidades en cuanto a logística y público y, ¿por qué no?, acumular un poco más de experiencia vital y profesional. En definitiva, teníamos que ser las personas que somos a día de hoy y que llegara este momento exacto.
¿Qué tipo de conciertos vamos a ver en Madrid y Barna, cómo estáis preparando estos shows?
Como decía, ahora mismo estamos a todo trapo con los ensayos generales. Había mucho equipo que probar, tenerlo todo funcionando y conocerlo bien para no dejar lugar a los fallos en el directo. Hasta ahora cada sección ha trabajado por separado: Las coreografías, coros y cuerda se han trabajado independientemente para después ir todos sobre la misma base y engrasar la maquinaria del todo en una tanda final de ensayos conjuntos.
Al margen de que la banda de metal ensaye, hay muchos detalles como el vestuario, atrezzo, monitoraje, narraciones, etc…, que llevan su tiempo y se va desarrollando en paralelo. Es algo que no podríamos haber hecho sin la ayuda de gente como Zarina -con las coreos, vestuarios y demás- o Anti, que siempre aporta a la causa y es parte fundamental del equipo.
¿Qué producción llevaréis?
El concierto de Madrid será el que más producción lleve detrás. Al jugar en casa, y en una sala grande como La Riviera, podemos permitirnos el llevar una serie de montajes y de personal que -al menos a día de hoy- sería inviable movilizar para ir a otras ciudades. Entonces, en Barcelona, Sevilla y Valencia haremos una versión algo más reducida, con menos coro, menos sección de cuerda y menos baile.
Volvéis a lo grande, una Riviera que ya habéis casi llenado con LEO y que ahora retomáis con STRAVAGANZZA. ¿Qué tal está yendo la venta de entrada y qué previsión tenéis para estos dos conciertos?… Las cosas están difíciles pero varias de las bandas españolas seguís funcionando y parece que hay interés… ¿Cómo se ve desde dentro?
Pues las noticias que recibo son bastante buenas y la previsión puede que no sea de sold out a ciencia cierta, pero sí de unas salas con un gran aspecto. Desde dentro hay veces que es complicado no ponerse tremendista, porque las cosas en general no están bien. Se suma una serie de factores económicos, sociales e institucionales para que cada vez sea más difícil organizar un concierto y acceder a la música como público. Pero aún así seguiremos en la brecha; nos puede el ansia de sacar adelante nuestra propuesta.
¿Cómo ves a la banda y a tus compañeros tantos años después? ¿En qué ha cambiado (si es que ha cambiado) y en qué sigue igual la banda en esta vuelta?
Los cambios son para mejor; no hay razón para no ser 7 años más sensatos o mejores músicos de lo que éramos entonces. Aparte de eso, la sensación es de funcionar todo desde el principio y estar la máquina engrasada desde relativamente pronto, como si lo estuviéramos cogiendo justo donde lo dejamos pero con energías renovadas y haciendo las cosas mejor.
Por supuesto a Leo y a ti, e incluso a Pepe, os tenemos más controlados y nos vemos habitualmente y sabemos un poco por dónde andáis y qué estáis haciendo en todo momento… Pero a Patricio sí le teníamos más perdida la pista. ¿Qué tal el reencuentro y qué ha estado haciendo en este tiempo que ha estado más “perdido” a nivel musical, al menos para el gran público?
Patri ha estado estos años más centrado en estudiar; temas de pedagogía, aprendizaje musical y cosas de ese campo. Aparte, ha hecho alguna colaboración en Legado de una Tragedia, en algún concierto de Leo e hizo de Caifás hace poco en el montaje de concierto de Jesus Christ Superstar. Pero, por lo general, ha sido un periodo menos centrado en tocar.
Mucha gente se pregunta si esto es una reunión puntual, si tiene visos de continuidad, si la banda vuelve a estar activa, si habrá más conciertos, Sudamérica… Dame un poco de luz a estas dudas, anda…
Nuestro objetivo siempre ha sido y sigue siendo la dominación mundial. No vamos a ir a por menos :)… (Bromas aparte) Por el momento, vamos a centrarnos en hacer estas presentaciones a lo grande y quitarnos la espinita de darle al legado que ya tiene la banda la magnitud que merece. A partir de ahí, hay algún concierto ya confirmado para 2018 y la banda seguirá en activo a todos los efectos. Simplemente, nuestros esfuerzos estarán más enfocados en la calidad: menos conciertos pero más grandes y mejores. Y, a su debido tiempo, centrarnos en la composición y grabación, pero todo siempre respetando unos tiempos que nos permitan trabajar a gusto y según el estándar de calidad que queremos mantener.
Fueron cuatro discos si no me equivoco y en un proyecto en el que tú te involucraste casi desde el principio. ¿Cómo fue esa primera etapa de STRAVAGANZZA, cómo se ve mirando desde ahora?
Patricio y yo entramos en la banda en 2006, para girar después de «Hijo del Miedo» y después grabar «Requiem». Desde el principio entramos a aportar todo lo posible y dar rienda suelta a toda nuestra creatividad, porque la propuesta de STRAVAGANZZA es algo realmente grande. Fue una etapa genial y dura a partes iguales; intentamos llevar nuestra música al mayor público posible, tocamos en muchísimos sitios y pasamos toda clase de penurias, pero también momentos inolvidables, de lo mejor que he podido vivir encima de un escenario o dentro de un estudio. Después de 15 años girando y unos 25 discos grabados como profesional, puedo decir tranquilamente que mi trabajo con STRAVAGANZZA es del que más orgulloso estoy.
Sin duda fuisteis pioneros y aportasteis algo distinto y fresco… e inclasificable. ¿Crees que el tiempo y la historia, al menos en nuestro país, ha valorado y ha sabido apreciar el impacto e importancia que tuvo y tiene una banda como STRAVAGANZZA?, ¿qué comentáis o penséis al respecto vosotros mismos de esto?
Creo que en esto puedo hablar por mis compañeros aunque no viviera los inicios del todo. Desde el principio STRAVAGANZZA ha sido consciente de que es una propuesta muy densa, para apreciar de una manera a la que mucha gente no está acostumbrada. Bebe de tantas fuentes diferentes y algunas son tan oscuras que incluso puede que al fan medio se le escape buena parte del contenido. Pero también es cierto que uno no puede esperar que siempre capten el 100%; STRAVAGANZZA es algo con lo que, años después, puedes seguir descubriendo matices, arreglos, detalles de interpretación que no ves hasta que vuelves a ello tras un tiempo.
Entonces, es complicado entrar a valorar si realmente la apreciación que ha tenido en nuestro país ha sido proporcionada o no. Personalmente, creo que quizá el binomio público-industria no estaba preparado para ello y sólo con el tiempo y la evolución de ese público, al adquirir más perspectiva, se ha podido ver que no estábamos equivocados del todo. Aparte, vemos cómo muchas de las cosas que hicimos han servido de inspiración para otras bandas y eso te aporta cierta sensación de estar en lo cierto… y que merece la pena seguir intentando forzar los límites de lo que se supone “correcto”.
Hablando de tí, siempre has ido de la mano de Leo Jiménez (y viceversa) en casi todos los proyectos y bandas de ambos. ¿Cómo es vuestra relación personal y profesional?
Leo, aparte de ser el mejor cantante con el que he trabajado (y van unos pocos ya), es uno de mis mejores amigos y cualquiera que me conozca sabe que esto no lo digo con facilidad. Es una persona que, desde hace más de 11 años, ha estado a mi lado en mis mejores y mis peores momentos. Somos personas muy diferentes, opuestas en algunas cosas, pero de alguna manera nos complementamos de una forma que hace que vaya con él a muerte en lo que proponga. Pero, al mismo tiempo, puedo llevarle la contraria cuando creo que no lleva razón o hacer que reflexione antes de dar algún paso en caliente. Y también puede decirme cuando me equivoco. Para eso quiero a los amigos, realmente.
Por cierto, no sé si estoy siendo exagerado o injusto pero creo que ni el último disco de LEO en sí ni la respuesta ha sido quizás la que esperabais. Es cierto que los conciertos han ido bien y que sobre todo en Latinoamérica la cosa va viento en popa, pero no sé, ¿cómo lo veis analizando fríamente ya unos meses después y en perspectiva?, ¿quizás esperabais más?
Por una parte, siempre esperas más. Hubo un punto en el que realmente vimos que la cosa iba realmente hacia arriba y parece que se ha quedado ahí a punto de explotar definitivamente. Por otro lado, cuando sales a hacer tu show en salas, puede que no vengan 1000 personas a todas, pero siempre hay una de repente con un montón de público y además te vas a casa con la sensación de que la gente lo ha disfrutado y que te tienen por un valor seguro a la hora de comprar una entrada. Nadie pone en duda la solvencia y la calidad de Leo en un escenario y ésa es nuestra mayor baza, junto con la honestidad en lo musical. Creo que estamos en el camino adecuado porque, aunque los pasos no sean de gigante, siempre va hacia arriba poco a poco y sin coger atajos.
Para terminar, la pregunta que siempre me gusta hacerle a los músicos últimamente, y más a los que ya no sois unos chavales ni unos recién llegados. ¿Cómo veis la escena desde dentro y cuál es la situación real de las bandas en este país a día de hoy?
Vivir de la música en estos tiempos es una anomalía estadística. Hace falta compaginarlo con otras cosas (trabajos de día, clases, ser músico de sesión… lo que toque) para poder dedicarle el tiempo, esfuerzo y dinero suficientes a un proyecto personal. Y todo esto último es esencial, se ve perfectamente cuando una banda está haciendo las cosas bien, cuando son gente profesional con los pies en la tierra… Muchas veces esto no se ve recompensado, por las razones que sea, pero es la manera de que funcione y de que perdure en el tiempo y no se quede en una anécdota.
Un abrazo y mucha suerte en estos dos próximos conciertos y nos vemos pronto, amigo Expósito. ¿Algo que te apetezca decir para cerrar esta entrevista?
Scariolo dimisión, Joan Plaza selección! 🙂 (ndr.: ¡cómo se nota los que somos de basket, jeje)
Texto: David Esquitino (david.esquitino@redhardnheavy.com)