Tras Rock The Coast y Rock The Night, ya como Rock Imperium asentado, el festival ha conseguido dar un paso adelante la segunda edición este año y, después de la anterior, que podríamos catalogar de muy buena, ésta parece que la ha superado.Tras la primera parte de la crónica, ya tenemos aqui la segunda hablando de la segunda y tercera jornada. ¡Rematamos la crónica del Rock Imperium! 

Rock Imperium

…REGRESO AL FUTURO del Hard Rock

Para el sábado nos esperaba una jornada con algo de música más accesible, más comercial, para todos los públicos y garantizar, así, una jornada de Hard/metal por qué no decirlo, más en familia… Eso sí, en contraposición y para emociones fuertes, sonidos en el otro extremo, bastante más duros y dedicados a otro público en la parte de arriba del parque.

Las actuaciones en la zona del césped fueron de forma cronológica, digo cronológica en el sentido que se fueron sucediendo varias generaciones (desde la banda más actual hasta la más longeva), una especie de viaje en el tiempo mostrando de alguna manera la evolución (salvando las distancias) de un estilo, el hard rock,…a lo largo de la historia de la música.

Chez Kane

Comenzaban The Big Deal, un producto fichado por la factoría Frontiers y, como no podía ser de otra manera, con el omnipresente Alessandro del Vecchio aparece dentro de este proyecto,…en esta ocasión tocando el bajo con la formación serbia. Dos chicas al frente mostrando un rock melódico y fresco… La alternativa eran Skullmania, rock contundente de la tierra, seguidos de The Black Tree, post rock, post metal con voz femenina…después de ver el comienzo de los murcianos podíamos volver al rock-AOR de Chez Kane.

Artista también de la factoría Frontiers y una cantante a la que se le está dando “bombo” en el mundillo más melódico… de hecho, el año que viene vuelve a visitar nuestro país. Música la que desempeña la británica muy accesible y “coreable”, la cual nos hacía rememorar los años 80, época dorada del estilo…si querías volver escuchar sonidos extremos tendríamos que volver de nuevo a “escalar” para “gozar” con el metal-viking de Midjungards o los gallegos Bloodhunter con la tremenda voz de Diva Satánica al frente.

Metalite con bastantes problemas en el inicio de su actuación presentaron en Cartagena su metal moderno, con muchas pistas pregrabadas (las que dieron los problemas precisamente). Los suecos era otra de las paradas en el viaje en el tiempo del que hablaba al comienzo. Su cantante y la predisposición del resto de componentes salvó la papeleta….y les seguía otra banda que despertaba la curiosidad de los presentes, The Night Flight Orchestra, la opción mas “soft-rock” de la jornada,… sugestivo el proyecto del frontman de Soilwork (en su momento también del guitarrista David Andersson, que se suicidó hace tan solo unos meses) acompañado por una competente banda y unas simpáticas coristas. Viajando a sonidos añejos, incluso con reminiscencias “disco”, hicieron de su actuación una interesante propuesta para pasar un agradable rato.

Europe

H.E.A.T. se comieron el escenario. Con el sol de cara y un excesivo calor, no podíamos creer la enérgica actuación de esta banda y más en concreto la de su cantante Kenny Lekremo. De vuelta a la banda tras la salida de Erik Gröwall (actuaría después con Skid Row) no paró de agitarse y correr, todo un torbellino sobre las tablas que hizo las delicias de sus adeptos y sorprendió a más de uno en la hierba con su desparpajo y su “español”…Tendrás otra oportunidad de verlos en su gira por el estado en breve. ¡No te los pierdas!

La alternativa de Cryptosis la teníamos en el tablado de arriba. Pero después del vendaval Lekremo y Cía, llegaba uno de los pesos pesados, Europe. Veteranía, calidad, madurez y profesionalidad…con uno de los mejores “frontman” del panorama, Joey Tempest, nos deleitaron con su gran hardrock, marca de la casa. Al margen de su puntual éxito “estratosférico” que supuso en su momento,  la cuenta atrás, (mucho del personal se quedó solo con esa fase) los suecos tienen una saga de discos que hay que tener muy, muy en cuenta…desde sus primeros redondos hasta sus últimos trabajos más pulidos y elegantes.

Una banda con clase sobre el escenario, una propuesta de hard rock muy bien ejecutado y todo un ejemplo de cómo hacer las cosas. Por cierto, mientras llegaba el artista principal, “pasito a pasito” podríamos acercarnos a ver a Iron Curtain (heavy clásico local) y Lepoka (folk rock desde Castellón), dos buenas apuestas nacionales con buenos directos ambos, diferentes, eso sí.

Deep Purple era la propuesta grande de la noche… Y no hay nada que decir sobre esta “leyenda” viva, no solo del rock (o hard rock), sino de la historia de la música en general. Sin ningún tipo de artificio ni decoración se mostraron al público. La extensa lista de canciones míticas que atesora la banda hace difícil crear un “setlist” que complazca a todos los asistentes; pero durante su tiempo en escena (menos del programado, por cierto), deleitaron al personal con algunos de sus “clásicos”. Si bien los años no pasan en balde, (cuatro de los miembros pasan los 70 años), el último fichaje a la guitarra, aporta la suficiente energía y jovialidad para mantener el espectáculo medianamente atractivo.

Deep Purple

Con muchos pasajes instrumentales para el descanso del cantante, hilaron una actuación que creó controversia entre el respetable, cuestionando la forma de la banda. Ellos son los únicos que pueden decidir qué hacer en su futuro.

Durante la actuación de los padres del “hard” y para un público más joven y activo, teníamos por otro lado a los incombustibles Crisix poniendo patas arriba el escenario “chico”…Y les seguían Wormed hasta terminar los británicos, para empezar los “bolos” de Söen y Der Weg Einer Freiheit que despedirían la jornada del segundo día. Los primeros en la campa (y en tono más duro pero prog) y los segundos en la carpa (en tesituras de metal extremo).

Galería de fotos de los nombres medianos (y bandas emergentes) del Rock Imperium.

…UN BESO DE DESPEDIDA

Si bien el plato fuerte de la jornada, y del festival, se había dejado para el final (ok, casi el final), lo cierto es que el resto del cartel se antojaba atractivo a pesar de la baja de última hora de Nestor, a mi entender uno de los grupos que despertaban más curiosidad del festival, al menos para los nostálgicos interesados en el estilo melódico y ochentero que se marcan los suecos.

Siska

Cabe destacar, por ese lado, la actuación en la misma línea, salvando las distancias, que realizaron los 91 Suite, banda encargada de suplir la baja y desarrollando su rock melódico que les ha caracterizado de siempre. Como decía tendríamos bandas para satisfacer al metalero más melómano; pero los encargados de estrenar el insinuante escenario de los cabezas del festival, serían Siska, banda italiana liderada por el talentoso guitarrista Mattia Sisca que nos ofreció con su saber hacer una actuación entretenida a base de heavy clásico impregnado de virtuosismo…

Hacía un ratito que la jornada ya había empezado con Elure en la carpa de la zona de chiringuitos. El combo cartagenero desplegó su rock convencional y desenfadado para los asistentes de la primera hora que seguidamente podrían disfrutar de los vecinos Rainover con su fusión de gothic y doom,… mostrando contundencia y mezclando la versátil voz femenina de la cantante con las guturales de sus compañeros.

La segunda banda en los escenarios principales del domingo también provenía de Italia, Frozen Crown, representantes del power metal de fantasía. Herederos en buena medida de otras bandas italianas que a comienzos de siglo lograron fraguar una escena que traspasó fronteras. Les seguían los citados 91 Suite, AOR local de primera, y si nos quedamos a verlos enteros nos perderíamos el comienzo de los zamoranos Death & Legacy, de nuevo en la carpa. Otra banda de metal melódico que mezcla voz femenina con guturales masculinas a la que relevan en este lugar Salduie, con un giro musical y adentrándonos en el mundo del folk metal. Los maños incorporan flautas y gaitas a sus historias sobre celtíberos. ¡Que nadie diga que el sábado no había variedad para todos los gustos en el festival!

De vuelta a uno de los “Main Stage”, nos pudimos encontrar a una banda que despertó gran interés y es que la unión de componentes de JUDAS PRIEST, ACCEPT o LORDS OF BLACK (por nombrar el proyecto principal de Ronnie Romero) era suficiente reclamo para no perdernos la actuación de Elegant Weapons. Con su heavy metal adornado con tintes de hardrock más clásicos, aportados por la voz de Ronnie, hizo que se quedara corta la interpretación de su primer LP…que tuvo que ser complementada por versiones de Black Sabbath o UFO. Clase y presencia sobre la tarima que daría paso al “bolo” que más desasosiego pudo darnos el festival.

LOrdi

Y es que sufrimos viendo a Lordi… pero no por sus monstruosos disfraces, sino por el calor que tuvieron que soportar con ellos puestos y con todo el “solazo” dando de lleno sobre sus caras a mitad de la tarde. Ellos, ya acostumbrados, cumplieron de sobra a tenor del arrojo mostrado en el intempestivo horario que les tocó.

Si antes vimos la clase de Ronnie y Richie Faulkner ahora nos tocaba la elegancia y maestría de The Winery Dogs. El “power-trio” formado por Kotzen-Portnoy-Sheehan (casi nada el legado historia detrás de esos nombres…) es sencillamente impresionante. Nos aportaron a partes iguales virtuosismo y delicadeza, a pesar de algún fallo técnico, en una actuación sobresaliente. No nos olvidemos que mientras tanto actuaron en la carpa, los vizcainos Rise to Fall y su metalcore, los barceloneses RedShark con su speed metal de bigotes y mallas (como nos gusta decir a veces), los americanos Misery Index y los belgas Aborted con su death metal. Como decimos, un sábado para todos los gustos.

Y con la campa llena hasta la bandera (incluso algo más que los días precedentes) la espera se hace larga. Ya durante todo el día se podía adivinar que banda es la que el público venía a disfrutar…y no sólo adeptos al rock más incondicionales, sino gente curiosa por ver el espectáculo de… ¡la banda más caliente del mundo… Kiss! Y es que además, la actuación estaba anunciada como la última de la banda en España antes de su retirada (la del año pasado en Barcelona también lo era, y seguramente la siguiente del año que viene donde sea, pero ese es otro tema jeje). Aún con estas premisas el público disfrutó y mucho. Para quien ha visto a la banda más de una vez, nada nuevo… pero para quien no la había visto… es espectáculo total.

KISS

Sea como fuere, lo pasamos en grande: Caras pintadas de niños y mayores, explosiones, llamaradas, serpentinas, globos, humo… Y fuegos artificiales, tirolinas, sangre, bolas de discoteca, plataformas voladoras…, además de muchos clásicos y temazos. Quien no lo haya visto nunca, ¿perdió su oportunidad?

Mientras actuaban los de nueva York,…volviendo a la carpa, se podía ver la actuación de Demon… otros pioneros de la NWOHM cuya carrera y presencia en el festival resultan clave para comprender la historia del rock y en particular del heavy metal. Después y para rematar todas las actuaciones del escenario más pequeño y extremo, los noruegos Nordjevel finiquitarían con su black metal, y seguimos de variedad estilística de sábado noche.

Aún quedaba uno de los platos fuertes en el otro escenario principal, al lado de donde se habían ”despachado” los del último beso. Además de ser una banda mítica, Skid Row, parece ser que con la inclusión a filas de Erik Gröwall (por si alguien no lo sabe, es el ex cantante del grupo H.E.A.T., que tocaron el día anterior) han entrado en una dinámica fantástica reviviendo tiempos de juventud, además de presentar un muy interesante nuevo dico. Y es que el cantante después de superar una leucemia, está en una forma increíble y eso se nota en sus directos.

Los temas que catapultaron a la banda toman otra dimensión en la voz de Erik. Actitud, garra, salvajismo,…puro rock and roll sin filtros. Bolazo para finalizar una edición, ésta del 2023, verdaderamente para guardar en la memoria.

Texto y fotos: Juan Ramón Felipe para Redhardnheavy.com

Galería de fotos del Rock Imperium – Bandas principales.