Crítica del disco "Requiescat in Pace" de AQUELARRE

Crítica del disco «Requiescat in Pace» de AQUELARRE

Dic 05, 2014 por Red Hard´n´Heavy en Discos

AQUELARRE: “Requiescat in pace” (CD Music)

Vamos a repasar uno de los discos que más me han sorprendido este año: se trata del primer álbum de “AQUELARRE” que lleva por título “Requiescat in Pace”, un poco complicado de recordar e incluso de buscar en el Google pero que demuestra lo trabajado que está este trabajo. Vamos allá, a ver qué tiene…

Primero os contamos que AQUELARRE es una banda procedente de Vigo, que lleva desde 2007 haciéndose un hueco en el panorama nacional y que ahora tienen un gran apoyo con este álbum. Su estilo es muy variado aunque su amor por el Power Metal no hay quien se lo niegue, pero también tienen muchas notas mas características de otros subgéneros en su sonido. Tras varios cambios en la formación a lo largo de estos años, la banda está ahora formada por Icko Viqueira a la Voz; Adrián Rosende «Viyu» es el guitarra solista; Cristóbal Otero el guitarra rítmica y coros; al bajo encontramos a Ramón Rodríguez «Moncho». Enmanuel Iglesias es el encargado de los teclados y coros; y por último pero no menos importante, David Castro a la batería y percusión.

Una portada muy poco Power pero sí muy gótica, muy bonita mostrando un ángel que más nos recuerda a una banda finlandesa que a una de Galicia mostrando una sobriedad total, mucha elegancia además de hacernos la vida mas fácil con un libreto donde, ¡¡oh, sorpresa!!, se pueden leer las letras sin coger un microscopio de aumento. No os creáis que todo me encanta y me convence 100%, que, la única foto de la banda en todo el álbum es para no comentarla ni decir nada. Poco famosos se van a hacer si sólo distingues sus formas cerveceras en la foto. En fin, corramos un tupido velo…

Se abre el álbum con unos sonidos que te transportan totalmente a los 80´s/90´s, con reminiscencias a sonidos de piano de los que daban inicio a los más alocados bailes pero que, tras esa cara de sorpresa inicial, ya se oyen por detrás las guitarras que nos molan para luego pasar a escuchar unos buenos acordes de Heavy Power característicos de lo que es el sonido de AQUELARRE y anunciando a Icko: Una voz clara, nítida, firme que en ocasiones me recuerda un tanto a esa otra gran banda nacional, MERCURIO. Tema largo este “Ceniza”, más de 5 minutos donde se puede escuchar la rápida y potente batería de David, alocada pero controlada al máximo en su doble bombo. Con un estribillo fácil, divertido y que a la segunda se te queda procesado ya para sus directos. Buena forma de empezar este álbum terminando con ese piano ochentero junto a una guitarra a lo Schenker que es como un resorte para que hagas un poco de headbanging sin pensarlo.

Para seguir muy bien, “Ven a por mí”, con la introducción de un gutural un tanto seco pero que le da originalidad a la parte instrumental rápida y al sonido que viene a continuación dejando a Icko que no aparezca en un rato luciéndose sus compañeros. Una letra rebuscada, unas dobles voces y un ritmo desenfrenado para mover la cabeza cuanto más rápido mejor, que la verdad es que me ha sorprendido la influencia de ciertas corrientes nórdicas en el complejo desarrollo del tema.

Nada que ver con lo anterior el sonido del comienzo de “Felurian”, un corte demasiado nacional para el resto del álbum; no tan elaborado y que para mi gusto es de los menos apropiados de este “Requiescat in Pace”, por la introducción de un sonido de teclado demasiado alegre en mi opinión. Riff poderoso, muy elaborado pero un tanto desencajado en la estructura del tema, largo y donde el sonido del teclado saltarín (escucharlo y me decís), es sorprendente. Mucho más de mi agrado es el cuarto corte, “En Pie”, ya con un Power donde tiene mucha importancia la voz de Icko; este tema es más rápido dándome la sensación que es cuando la banda alcanza sus mejores cotas mezclando rapidez con mucha melodía, tal y como sucede en “Sangre y Dolor”, donde el bajo es más protagonista, ¡qué sonido!, dura pocos segundos pero es primitivo y seductor.

Aquí ya AQUELARRE se tira de cabeza al Power más épico contando leyendas ancestrales fácilmente entendibles por el público hispanoparlante, no acostumbrado a que les cuenten historias de traición en idioma castellano. Me encanta la parte instrumental, me parece de lo mejorcito del álbum con esas guitarras rápidas en las que puedes ver los dedos arriba y abajo del mástil acompañados del teclado, ya con sonido actual. En el sexto corte, la increíble “Guardian”, están acompañados por un crack nacional, nada menos que José Rubio que les acompaña en este tema completamente Power Metal, sorprendente, muy elaborado y de los que te pone como las motos a hacer headbanging en tu casa y en el coche.

Para ya cerrar este muy buen álbum, AQUELARRE apuesta por un tema en plan epopeya, de 7 minutos y algo llamado precisamente “Elegía” y que, si os pensabais que todo eran alabanzas mías al disco, os habéis confundido porque aquí mis oídos no captaron unos sonidos agradables al comienzo con ese cambio de registro de voz de Icko rompiéndolo todo, tus esquemas y amores incluidos. El caso es que ese sonido con el que comienza la parte de estribillo tiene reminiscencias del fantástico tema de Miguel Ríos para ya dejar que fluya el más puro sonido AQUELARRE que es lo que mola aunque ese teclado…, ese sonido…., me rompe los esquemas. En este disco, queda bien demostrado que AQUELARRE no van de fáciles, que todos los temas están trabajados al máximo y este final no iba a ser menos, complejo y bien desarrollado dando cierre a un gran álbum, de lo mejor caído en este año en nuestras manos a nivel nacional (al menos en cuanto al estilo se refiere).