Un nuevo festival irrumpe con mucha fuerza en Europa, THE ROCK CIRCUS. Este evento es el más grande de los festivales que se hacen en sitios cubiertos y así lo hemos vivido. Allí estuvimos, por circunstancias profesionales, y aquí os lo contamos a modo de resumen general.

ROCK CIRCUS – Viernes 3 / Sábado 4 y Domingo 5 de noviembre de 2023 – Brabanthallen, Den Bosch, Holanda

Cartel

Os diremos que ha tenido lugar este mes de noviembre, concretamente empezó el viernes 3 de noviembre 2023 hasta el domingo 5 inclusive, en el sur de Holanda. Con un cartel espectacular y un lugar increíble que merece todo tipo de detalles para que en su II edición (ya con fecha para 2024) podáis disfrutarlo. Vamos por partes.

THE ROCK CIRCUS se celebra en una preciosa localidad holandesa que se llama de tres formas; una, la del GPS, que se llama de forma peculiar (´s-Hertogenbosch) así, empezando con apóstrofe, guion medio y luego el nombre; otra que es Hertogenbosch y que viene así escrito en algunas indicaciones… y luego la de los amigos y conocidos, “Den Bosch” con lo cual encontrar el sitio, de noche, lloviendo a mares y flipando con lo del apóstrofe y la “s” minúscula, es un poco complicado pero después de dar bastantes vueltas, conseguimos llegar. El lugar donde se celebra, el pabellón, se llama “Brabanthalle” y es un lugar multiusos para ferias, congresos y lo que haga falta (como IFEMA en Madrid, para hacernos una idea) pero a lo exagerado. Instalaciones increíbles, totalmente conectadas entre sí y de las que se puede aprovechar todo para cualquier tipo de eventos… y si es un festival, lo han clavado. El Brabanthalle es perfecto para todo, nos ha encantado.

Empecemos comentando que dicho lugar cuenta con un inmenso aparcamiento al lado que los organizadores han habilitado para caravanas (Camper Park) pero no es muy recomendable la tienda de campaña… más que nada porque es noviembre y Holanda, con trombas de agua continuas, unos vendavales que te levantaban del suelo con lo que, mira que me gusta el camping, pero mejor dentro de la furgoneta que se estaba mucho mejor. Mal está de alojamiento, porque ´s-Hertogenbosch no es un lugar turístico y había poco disponible, y a precios muy caros, obligándote a trasladarte a otros pueblos de alrededor. Es verdad que THE ROCK CIRCUS está dirigido a público local ya que la afición al Metal por allí (con Eindhoven cerca, Tilburg, Bruselas, etc) es increíble, con lo que luego se van a casa y sin problemas. Al final, un pequeño hotel de la cadena Zwam (muy popular en la zona) nos ha acogido maravillosamente y no muy lejos de allí. Pero eso sí, si no vas con coche es muy complicado para volverte a altas horas de la madrugada.

Rock Circus

Dentro alucinas, mira que hemos estado en otro recinto parecido (también en Holanda, en el Klokgebouw de Eindhoven con el DAS OKTOBER METALFEST) pero este, el Brabanthalle, es mucho más grande, contando con dos escenarios principales juntos (en los que las enormes serpientes de EPICA entraban sin problemas) y con otros escenarios más pequeños (The Buzz) que no se interferían para nada en el sonido en ningún momento. Además, cuenta con una zona con otras actividades con un “piano bar”, de lo más acogedor y que ha estado interpretando canciones de EPICA, MAIDEN, METALLICA, etc., para que pudieras tomarte una cerveza tranquilamente entre grupo y grupo. Eso sí, sonaban todas tristes, muy tristes, lo mismo son muy elegantes pero cuando ya llevaba 25 veces el “Fear of the Dark”, que sonaba muy Doom, yo tenía ganas de coger el piano y… pues eso.

Además del pianito, otros artistas amenizaban las jornadas como los divertidísimos BLAAS OF GLORY (que son los de Wacken), súper simpáticos y graciosos, un dúo femenino (RUIGE`S RITAS) además de una formación de gente nada joven pero súper graciosos llamados METALLIKOOR cuyas versiones me hicieron pasar un rato la mar de ameno. También todo lo relacionado con el circo (sin animales, por supuesto) como malabaristas, zancudos, etc., que iban entre la gente dando un toque especial a un festival diferente. Además, para darle más autenticidad, unas carpas y lonas rojas y blancas llenas de lucecitas, decoraban preciosamente el interior. Un alucine.

En cuanto a las bandas, no entendí mucho que el viernes 3, se abriera para bandas tributo que estuvieron muy bien pero no dejan de ser esto con lo de siempre de IRON MAIDEN (UP THE IRONS), METALLICA con los americanos PRESENT DANGER y LINKIN PARK – LIMP BIZKIT con BIZKIT PARK. Además, curiosamente esa noche no dejaban vender en el mercadillo para los asistentes; curioso pero en plan profesional no hizo ninguna gracia. Tanto correr para cerrar. En fin…

Sábado 4 de noviembre 23:

Powerwolf

El sábado ya era otra cosa: El cartel era de lujo, abriendo muy dignamente y con una fuerza tremenda nuestros compatriotas ANKOR, en el Arena Stage 1, con un juego de luces, un sonido espectacular y una cantidad de gente muy grande para ser la 1 de la tarde (hora de comer en Holanda). ANKOR se están llevando a Europa de calle y merecen todo nuestro apoyo. ¡Genial!

Después BLIND CHANNEL (de la zona, adorados por allí) que se alternaron con ENEMY INSIDE, BEYOND THE BLACK (fantásticos, qué banda más tremenda), CRADLE OF FILTH (arrolladores, con todo su show completo y un Dani en plena forma), BEAST IN BLACK poniendo a bailar hasta la extenuación a todo el pabellón, BLACK VEIL BRIDES moviendo a toda la juventud europea junto con HALESTORM y cerrando de lujo, POWERWOLF. Todo el show completo, toda esa parafernalia de iglesia, de misterio, con esos dibujos maravillosos y ellos muy rodados (van de tour en tour) con el Brabanthalle hasta arriba haciéndonos saltar, cantar y de todo. Un espectáculo inolvidable que a nadie deja indiferente. Diversión y el mejor Metal cerrando un día intensísimo y fantástico.

Domingo 5 de noviembre 23:

Al día siguiente, domingo, creímos que iba a ver menos gente pero no. De hecho, hasta que terminó (ya de madrugada) la gente abarrotaba el inmenso Brabanthalle para ver a INGESTED y AS EVERYTHING UNFOLDS que abrieron, los suecos IMMINENCE (me encantaron en Wacken), RIVERS OF NIHIL, RAMKOT, FINNTROLL (show igual que en el Midgardsblot noruego), EPICA cada vez mejor, una barbaridad de show, de sonido, de saber estar y ella, la preciosa Simone que cada día canta mejor y lo hace espectacularmente bien, cerrando LORNA SHORE (otros que se llevan a la juventud de calle) y los ELECTRIC CALLBOY que me hicieron alucinar. Esa mezcla de baladas de “Frozen” para dar un grito atroz y pasar a la caña más brutal y poderosa poniendo a bailar a todo el mundo, mayores y pequeños. ¡Qué sorpresa y qué espectáculo! Algo diferente para mentes abiertas con ganas de diversión y sembrar futuro, que se necesita. A mí me gustaron mucho a pesar que lo de “Frozen”, al ser vieja, me descolocó totalmente… pero salí encantada.

Luego hay que comentar el tema de accesos, con registros y colocación de pulserita azul de tela (muy bien) y con muchas zonas de WC limpísimos y por todas partes, así como muchos sitios para comer (churros con chocolate incluidos) a precios bien, bares por todas partes (a ver si aprenden los de aquí cobrando casi el doble de lo que valen las cervezas en Holanda) con lo que veías a gente consumir sin parar. Aquí siendo tan caro, pues pasas sed pero no te arruinas.

Público

Un aspecto más flojo del festival, y que estamos seguros que mejorará en próximas ediciones, fue el merchandising del evento. Soso, con el logo de “THE ROCK CIRCUS” delante y ya más el cartel por detrás pero bastante pequeño, a 35€ la camisetas, no eran lo suficientemente atractivas para llevártelas a ese precio… pero es que la sudadera era igual de sosa pero a 65€ y ahí se quedó todo. Una bolsa de tela, fea y sosa, a 15€ que ha sido la más cara de todos los festivales que he estado, y han sido unos cuantos. Para ellos… Además, el de las bandas en general era ho-rro-ro-so. Las de EPICA daban un susto al miedo (con la cara de Simone que era difícil de mirar), las de IMMINENCE oscuras, feas, sosas, mal hechas y todas a 35€ el sábado pero algunas el domingo subieron a 40€… Venga hombre, a robar a otra parte…

Increíblemente las más baratas y bonitas (a 35€ “solo”) eran los 3 modelos de POWERWOLF (y eso que tienen mil diferentes) pero que no subieron el precio. Distinción aparte para ANKOR, los nuestros, que tenían una en color rosa (por lo menos original) pero que también… jolín, 35€ en un bolsillo español en paro es un palo. Por cierto, nada del robo del cashless ni cosas raras, aquí la pasta y la tarjeta en su versión móvil o plastiquito era con lo que se pagaba y ya. A ver si ese método tomapelos desaparece de la faz de los festivales y van a robar a otro sitio.

En cuanto al mercadillo, era muy variado y con predominio nacional ya que curiosamente eran bastantes los vendedores que se habían desplazado desde aquí hasta tan lejos con una mercadería diversa y preciosa. Desde aquí un saludo y esperamos verles pronto en otro festival tan guapo como este THE ROCK CIRCUS que ya tiene fecha para 2024, concretamente el 2 y 3 de noviembre del año que viene. Venga, vámonos al Brabanthalle que os encantará.

Texto: Rocío Gómez / Completa galería de fotos del evento aquí.

Más info y próxima edición en: The Rock Circus | 2 & 3 november 2024 – Brabanthallen, Den Bosch