LEGION OF THE DAMNED+DUST BOLT+AGGRESSION – Viernes 8 de mayo (We Rock)…

Un curioso cartel, muy a la europea, es lo que el festival Thrash Inmortal ofrecía este año. Lo conformaban los catalanes AGGRESSION representando a la escena Thrash nacional, DUST BOLT como nuevos valores y LEGION OF THE DAMNED como cabezas de cartel consagrados.

¿Por qué decimos lo de los aires europeos? Pues porque tanto DUST BOLT como LEGION OF THE DAMNED son bandas que estamos viendo en festivales como el EIndhoven Metal Meeting o el Graspop Metal Meeting y que, año tras año, van escalando a posiciones cada vez más altas en los carteles de este tipo de citas. Sin embargo en España están todavía consolidándose y quizá sea ese el motivo de que la asistencia al Thrash Inmortal 2015 no fuera muy destacada.

A medida que avanzaba la noche, la sala iba cogiendo color, pero para el principio de AGGRESSION sólo unos pocos fieles se daban cita dentro del We Rock. La propuesta de AGGRESION es un Thrash a la americana que bebe de los grandes nombres como METALLICA, ANTHRAX, etc., si bien entre los temas de su primer trabajo, “Moshpirit”, y los de  su última entrega, “Viocracy”, hay notables diferencias derivadas de una orientación hacia lo técnico que se traduce en una mayor cantidad de cambios de ritmo y en composiciones algo más complejas. Si queda alguna duda de por dónde van los tiros, las guitarras de flecha de Pol Luengo y Nico Hernández, así como las poses de toda la banda la despejan: estamos ante un combo con un estilo completamente Old School, lo cuál casaba perfectamente con lo que la gente iba a ver.

AGGRESSION se esforzaron por conectar con la audiencia, y no sólo disparando temas como “Thrashing Your Brain” o “Psycho Brain”, sino dándolo todo en la puesta en escena con su  cantante y frontman fuera de la línea de monitores para acercarse al público o recurriendo al tan manido «Barcelona vs Madrid»: ¿A ver quién hace el pogo más salvaje? Ni por esas, aunque quizá “Moshpirit” fue el tema que más movimiento arrancó y no fue precisamente memorable. Quizá la próxima vez tengan más suerte con la asistencia o conecten mejor con el público a través de nuevos temas más directos, ya que su última entrega discográfica data de 2012.

Tras unos mínimos cambios de backline  tomaron las tablas DUST BOLT que a la postre acabarían siendo la sorpresa de la noche. Ni su juventud ni sus pintas de guiri alemán en la playa presagiaban la apabullante actuación que íbamos a presenciar. Y es que, si bien iban en la misma línea musical de AGGRESSION, consiguieron implicar mucho más al público en su actuación ¿Cómo? A través de una actividad frenética en el escenario de We Rock. La puesta en escena recordaba a la de MUNICIPAL WASTE y bandas similares, con todos y cada uno de los músicos aprovechando al máximo su parcela en escena. Si a eso le sumamos la calidad de las composiciones y la deslumbrante ejecución podemos decir que el  público despertó realmente cuando DUST BOLT, comandados por el guitarra Lenny B., interpretaron temas como “Children of Violence” o “Agent Thrash”.

DUST BOLT no dejaron  en ningún momento de agradecer al público su asistencia y apoyo, comentaron lo contentos que estaban de tocar en Madrid y tuvieron tiempo de pedir a la gente que jaleara y gritara para AGGRESSION. Mucha energía y muy buenos temas, asusta pensar los jóvenes que son y todo lo que pueden mejorar con la experiencia teniendo en cuenta la gran calidad que atesoran ya.

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Muy difícil lo tenían LEGION OF THE DAMNED para superar a DUST BOLT, y es que su estilo es mucho más pesado y no tan dinámico. En otros países son bastante más grandes y quizá esperaban haber metido más gente, o quizá no tuvieron su noche, pero el caso es que poco vimos de la banda que teloneó a SEPULTURA el año pasado y mucho menos de la que hemos visto actuar en Bélgica en alguna ocasión. La apatía de LEGION OF THE DAMNED se contagió al público que sólo respondía ante los temas más populares como “Sons of the Jackal” o “Mountain Wolves Under a Crescent Moon”.

Me atrevo a decir, aunque sólo como teoría, que la fría respuesta del público se derivaba de la débil conexión de LEGION OF  THE DAMNED con el Thrash. Me explico: en combos de Thrash/Death como SADUS o POSSESSED, si bien la voz tiende más al Death, los tempos de la música son más thrashers, sin embargo LEGION OF THE DAMNED se mueven en parajes musicales más Death metaleros, y aunque se veían bastantes camisetas de bandas de este género, el grueso del público parecía estar más próximo en gustos al sonido tradicional del Thrash, o bien a las nuevas bandas con influencias Hardcore como IRON REAGAN o incluso CANCER BATS. De hecho parte del público tenía esta estética de gorra y dilataciones tan habitual en los festis fuera de nuestras fronteras y que parece que poco a poco va llegando aquí también.

Reflexiones aparte, el concierto discurría con bastantes altibajos y con el frontman como Maurice Swinkles soportando el peso escénico. Mientras, el resto de sus compañeros (todos uniformados con camisas negras con motivos de la banda) ejecutaban con un deje mecánico sus partes instrumentales. Un momento a destacar fue la interpretación de “Death’s Head March”, pero al final el ambiente que se formaba en los picos más altos de intensidad duraba lo que un destello. Ésa sería la tónica general hasta el final de una actuación en la que la monotonía sólo la iban a quebrar “Cult of the Dead”, la rotura de una cuerda que cambiaron con una parsimonia irritante, alguno de los miembros de DUST BOLT bailando entre el público frenéticamente o el  homónimo “Legion of the Damned” para cerrar.

Un grupo con la experiencia de LEGION OF THE DAMNED (a la que hay que sumar la trayectoria de su cantante y batería como OCCULT en los 90 antes de adoptar el nombre actual) tiene que hacer un mejor concierto sí o sí tirando de tablas y galones y no pueden dejar a su público a medias, sobre todo cuando éste sabe que lo pueden hacer mucho mejor.

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Texto: Pablo Mayoral (pablo@redhardnheavy.com)

Fotos: Yolanda Moreno