Review de "Seasons of the black" de RAGE, nuevo disco

RAGE avanzando con paso firme: «Seasons of the black»

Ago 16, 2017 por Red Hard´n´Heavy en Discos

«Seasons of the black» no es su mejor álbum a estas alturas, ni lo pretende, pero mantiene el nivel de sobra y nos retrotrae a unos RAGE de antaño que ya se echaban de menos…

RAGE: “Seasons of the black” (Nuclear Blast)…

Parece que la nueva etapa de RAGE (la enésima) se consolida con este “segundo” disco, tras un “The devil strikes again” bastante más flojo en mi opinión. No era fácil sobreponerse a un nuevo giro en la historia de la banda, y a la salida sobre todo de Victor Smolski tras muchos años junto a Peavy, y aportando mucho a nivel compositivo. Pero una vez más el orondo bajista y cantante se sobrepuso y encontró dos recambios de garantías para mantener la historia de RAGE aún por muchos años. De hecho, parece que de nuevo el grupo está estable con el guitarrista venezolano (afincado en Canarias durante muchos años) Marcos Rodríguez, y el batería “Lucky”, griego para más señas. Buenos músicos y de nuevo una formación de calidad y garantías para una de las bandas más importantes, luchadoras y destacadas del heavy metal europeo y del speed metal germano, siempre marca de la casa.

Formación actual de RAGE

Por lo pronto la portada ya es atractiva y atrayente, 100% RAGE y en cuanto pinchas el disco lo primero que te viene a la mente es que la influencia es mucho más old school que clásica (de música clásica quiero decir… los seguidores de la banda saben a qué me refiero). Sin duda es fácil acordarse de trabajos potentes pero melódicos como “Black in mind” o “Unity”, por decir dos, escuchando este nuevo «Seasons of the black». Cierto es que no están (aún) al mismo nivel con esta formación que lo que consiguieron en su momento con momentos supremos como “Trapped!”, “End of all days” o “Soundchaser”, por citar tres de los mejores discos de la banda… pero van por buen camino, ¡sin duda! Vamos a desgranar poco a poco lo que tenemos por aquí…

Atrás quedan los experimentos orquestales como decíamos, y nos encontramos con los RAGE más puros, heavies y casi primigenios… Es decir, vieja escuela RAGE pero con la experiencia y el sonido más actual de la banda en los últimos años. Por supuesto hablamos de caña sin la rabia, suciedad y contundencia de los primeros tiempos, que nadie me malinterprete, pero sí es un placer volver a escuchar a unos RAGE tan viscerales y “primitivos”, dentro del punto sonoro del grupo en la actualidad, claro. Es decir, que la etapa post Smolski, y tras el intento y/o reunión puntual con sus viejos compañeros en REFUGE sin duda está más cerca de la etapa Manni (o posiblemente aún más de la de mediados de los 90 con Sven Fischer) que de la más exquisita, elegante y compleja de Smolski.

Es curioso que cada etapa de RAGE siempre ha estado marcada por la personalidad y sonido de su guitarrista, aunque bajo el auspicio y mando de Peavy, claro, y que el batería de turno siempre ha sido potente y de calidad… pero manda la guitarra. Ahora parece que Marcos Rodríguez ha cogido el testigo y sin duda ha recuperado a los RAGE más clásicos, sin perder la melodía de los últimos tiempos ni el toque del grupo en 2017, por decirlo así… Suenan más duros de nuevo, vaya, pero sin perder el punto melódico, ¡bien! Y curiosamente, o no, de nuevo estamos con un batería griego en el grupo, con lo que las reminiscencias de los RAGE de finales de los 80 y 90 vuelven de pleno.

¿The black missing link?

Otro punto, las letras… Se mantiene por supuesto el toque “filosófico”, profundo y de ciencia ficción marca de la casa, pero con un deje más oscuro, más tétrico y crudo, que en eso también veo un guiño al pasado del grupo… pero sin dejar de avanzar, supongo que me entendéis lo que quiero decir. Además, han incluido una suite de 20 minutos, pero dividida en 4 partes (que serían los temas del 8 al 11), al modo de aquellos “Ghost” o incluso “Welcome to the other side” de finales de los 90/primeros 2000. Como no podía ser de otro modo, este «The tragedy of man» (que así se llama) habla de la extinción de la humanidad, que es un tema bastante recurrente en las canciones de Peavy desde siempre. Personalmente me quedo con la primera parte del disco, pero para los fans de todas las caras de RAGE (ésta también) seguro que es un puntazo.

Además, y como extra (aunque en la versión promo no viene), han incluido un segundo CD con 6 canciones de los primerísimos años de RAGE (antes de hecho), aún como AVENGER. Son temas del EP “Depraved to black” y del “Prayers of Steel” (del año 85), en versiones regrabadas y “actualizadas”, como regalo para los fans más clásicos (y para que los descubran muchos seguidores que tal vez ni sepan de qué estamos hablando, jeje)… Que 33 años después, tiene su miga… Y lo cierto es que el lavado de cara a cañonazos como «Adoration» o «Faster than hell» no le ha sentado pero que nada mal (y comentar que la base de «Assorted by Satan» es la que años después Peavy & Co utilizaron para «Firestorm» en «The missing link»). Como se suele decir, si un tema es bueno es bueno, y ahora por fin suenan bien y sin esa maldita compresión y sonido a lata de las producciones sin pasta de antaño (se hacía lo que se podía, por supuesto). ¡Cómo molan los primerísimos RAGE, copón!

Dicho esto, y pese a por ejemplo lo buenísimo que es “Bloodshed in Paradise” dentro de la suite (que abre la intro “Gaia”) me quedo con temazos como “Time will tell” (bastante old school) o “Walk among the dead”, además del deje de caña y melodía a un tiempo que siempre borda RAGE como en la propia “Seasons of the black” o el single “Blackened karma” (que además escuchamos y vemos debajo). Excelente trabajo de los 3 músicos, a su vez gran trabajo de producción por parte de la banda (y de mezcla por cortesía del reputado Dan Swäno), y un nuevo paso adelante para apuntalar el presente, mantener el pasado y preparar el futuro de una de las mejores bandas de la historia del heavy metal europeo.

Header RAGE

En fin, que no es su mejor álbum a estas alturas, ni lo pretende, pero mantiene el nivel de sobra y nos retrotrae a unos RAGE de antaño que ya se echaban de menos… Y supera a su disco anterior y nos da excelentes viso de mejora de cara al próximo, ¿qué más queremos? Coherencia por su parte, y respeto total por la nuestra, que RAGE son de esas bandas que nunca fallan, por mucho que, insisto, aún están lejos de hacer su mejor disco desde el gran “Soundchaser”… pero van bien encaminados.

Texto: David Esquitino (david_esquitino@redhardnheavy.com)