Os damos nuestra opinión de la regrabación de "El ángel caído" de AVALANCH

Os damos nuestra opinión de la regrabación de «El ángel caído» de AVALANCH

Jun 13, 2017 por Red Hard´n´Heavy en Discos

AVALANCH: “El ángel caído” (edición XV aniversario)…

No cabe duda: Hacía años que la vuelta de una banda y los primeros planes de grabación en estudio no levantaba tanta polémica en este mundo de colmillo torcido del rock/metal patrio. De hecho, no recuerdo tanta tinta sobre papel por estos motivos. El regreso de AVALANCH, con un carácter internacional y virtuoso en su formación, y el anuncio de volver a grabar “El Ángel Caído” para celebrar su XV aniversario con un polémico crowdfounding de por medio, ha encendido el periodismo especializado y a los fans y detractores del artista asturiano.

Más allá de ahondar en lo que todos sabemos, la pregunta, con la tercera versión de la mezcla y masterización en mis manos, está clara: ¿ha merecido la pena regrabar un trabajo histórico? La respuesta, evidentemente, es sí… ¿Por qué? Sencillo: conocimiento, experiencia, medios, músicos y tecnología. Todos hemos crecido con “El Ángel Caído” clásico, sí, y es un disco histórico por sus grandes temas, pero, a nivel técnico y profesional, seamos serios… La primera versión del trabajo no ha aguantado el paso de los años. Grabado con justos medios y poca experiencia de Rionda, lo cierto es que, cuando volví al disco hace unos meses, pensé “la hostia, qué justito suena ésto”. Y estoy seguro de que su creador piensa igual, aunque no lo diga en voz alta.

Falta de fuerza, de presión, baterías programadas que se notan que están programadas (hoy por hoy te las puedes llegar a comer con humanizadores y paciencia en la escritura) y un sinfín de detalles técnicos que justifican completamente esta revisión en el año 2017. Por cierto, no, Víctor García tampoco era el cantante inteligente y con recursos expresivos que es hoy… Para gustos los colores, está claro, pero objetivamente esta regrabación de 2017, a nivel musical y expresivo, le da un buen repaso al lanzamiento original. Habrá detractores, y hay gente que prefiere la panceta de toda la vida al solomillo de restaurante de lujo, (ojo, que a mí me encanta la panceta y la tortilla…) pero el que diga que el primero es mejor que éste, es que simplemente no tiene oídos. Y no entro aquí en la emotividad y las emociones a nivel personal que pueda desprender el trabajo clásico por quién escuche los temas de siempre. Eso es otra historia pero, como producto, no hay color, y casi da miedo compararlo.

Y es que el poder de este redondo nace del derroche absoluto de calidad de los nuevos miembros de AVALANCH que, evidentemente, aún guiados y grabados por Rionda, han dejado su poso o sí o también. Mike Terrana ha dejado su “Terrana’s style” en sus líneas de batería, dando una calidez, potencia desmedida y carácter a los temas que no tiene nada que ver con la fría programación de antaño. Lo mismo han hecho, por supuesto, el bajista Magnus Rosén, José Paz a las teclas, en el espacio que le han dejado las orquestaciones y, para darlos de comer aparte, el brutal guitarrista Jorge Salán, que comparte labores solistas con el jefe, para sorpresa de algunos, y un redescubierto, una vez más, Isra Ramos que, digan lo que digan, borda con estilo todas sus partes. Lo bueno de Ramos, para su desgracia, es que tiene un tono y forma de sacar la voz que todo parece mucho más fácil de lo que es. Pónganse ustedes a cantarlo, y hablamos.

Desde el primer segundo hasta el final, la obra rezuma versiones mejoradas, siempre respetuosas con las originales, con nuevos arreglos que engalanan y embellecen, explotados en un sonido que lo llena todo y que sientes cerca y, en resumen, un producto donde, sin alardes, todo está donde tiene que estar, sonando todo a producción del siglo XXI… ¿Podría sonar mejor? ¿Podría sonar distinto?. Pues esta es una crítica que algún sector lanza contra Rionda, que quizá debería pasar las mezclas a un estudio. Con los resultados que él saca disco a disco que, al menos, tienen su aroma, no tiene pinta de que vayamos a ver una obra de AVALANCH sacada de otro horno que no sea el de Alberto.

Polémica, gustos y disgustos. Éste es el sino de toda banda grande destinada a llegar a mucho público. Y ocurre que tus decisiones son analizadas por todo el mundo. Ocurre esto también hasta con el estilo visual de este nuevo “El Ángel Caído”, pues nos sirven en esta edición de carácter exclusivo una reinterpretación de la portada clásica de Luis Royo, creada ahora por el artista gallego, Nekro. En mi opinión, esta portada casa perfectamente con los tiempos que corren y con las nuevas maneras de entender el arte digital: contrastada, elegante y con la mujer alada en una postura mucho más activa y expectante. De nuevo, habrá quien diga que no le hace sombra a la anterior.

Y poco más queda por decir de un trabajo que ha generado mucha expectación y, como digo, ha conseguido que se hable de metal. Eso nunca está mal. Dejo a propósito los cortes sin comentar porque, en este caso, conocido el marco, ahora es labor de cada cual escuchar las dos versiones, hacer el contraste y sacar conclusiones. No veo sentido a comentaros, canción a canción, las bondades y desacuerdos de esta obra. Queda de vuestra mano.

Sólo puedo decir que AVALANCH han hecho las cosas muy bien y que, en mi opinión, visto el producto final, y comparado con el de hace quince años, no le ha venido nada mal el lavado de cara a un tesoro fundamental de la historia reciente del metal español. Hay muchos más aciertos brillantes que errores en este lanzamiento y, ¡qué narices!, mejor tener dos discos, dos portadas, dos bandas interpretando un puñado de canciones ¿Qué daño puede hacer?

El mago Rionda ha vuelto a hacer de las suyas, rodeado de un “All Star Band” que de verdad es una banda que ha querido aportar su granito de arena a este trabajo. Alberto Rionda y sus AVALANCH siguen a lo suyo, contra viento y marea y centrándose en la gente que los apoya. Aquí hay un futuro prometedor que puede hacer grandes cosas. Es para estar nervioso. Ya veremos qué nos traen los AVALANCH 4.0, pero por ahora, podemos deleitarnos con este nuevo “El Ángel Caído”.

Texto: Javier Paredes