En un fin de semana en el que había TODO entre viernes y sábado, y entre Madrid y BCN, una de las opciones más atractivas era disfrutar del señor John García y su nueva banda de “buddies”. Os lo contamos en Madrid y os lo mostramos en Barna:

JOHN GARCIA & THE BAND OF GOLD + DEAD QUIET: Madrid, viernes 25 de enero de 2019 (sala Caracol)

Estaba claro que la mayoría estábamos en la sala para ver, escuchar y recordar a KYUSS, y el que diga lo contrario miente cual bellaco aullando a la luna como un coyote colocado de peyote y fumando marihuana mexicana en pipa de agua.

Ok, por supuesto que los tiempos de drogas, y de poderoso Groove Stoner Rock quedaron ligeramente atrás, pero no la leyenda ni el poso y trasfondo… musical. Vale, cierto es también que tras KYUSS el señor García ha pasado por otros interesantes proyectos como SLO BURN o HERMANO, bandas chicanas, pandilleras y casi psicodélicas, además de hacer algún disco en solitario, precisamente como el que venía a presentarnos, todo sea dicho.

Sí, el estilo entonces se llamó “Desert rock”, “Stoner” o sencillamente rock pesado, ralentizado, y amplificado, pero en el fondo siempre fue Hard Rock. De hecho es lo que nos encontramos en la Caracol hace pocas semanas, con banda remozada y compañeros nuevos, y una elegante madurez del protagonista que antaño no tenía, pero haciendo rock clásico y del bueno de toda la vida. Rememoramos los 90, cierto, los años en los que KYUSS y/o QUEEN OF THE STONE AGE fueron reyes pero también SOUNDGARDEN, y PEARL JAM, y STONE TEMPLE PILOTS o ALICE IN CHAINS, e incluso comenzaban unos aún “imberbes” MASTODON o MONSTER MAGNET que, a un servidor, le ponían más palote que los “grungeros”, las cosas como son.

Los baterías existen

Alternativos sí, pero con clase; “fumetas” también, pero con miras compositivas cósmicas; y roqueros rotundos de todas, todas. Y sabiendo que la base de todos ellos es BLACK SABBATH, ¿vale?… Y ahí estábamos, varias muchas decenas de viejóvenes formando de hecho 4 o 5 centenas de fans del rock de los 90 y del stoner y tratando de rememorar años pasados.

Eso sí, todos hemos crecido, y el propio señor García también, que ahora ya no viaja con sus colegas sino con su mujer e hijo, y se nos presenta muy centrado pero sin perder actitud ni energía en las cuerdas vocales. En definitiva, un mundo entre las canciones de KYUSS y sus intentos en solitario, esto es inevitable.

DEAD QUIET:

Dead Quiet

Por cierto, no es justo comenzar sin nombrar ni comentar los méritos de la banda telonera, unos desconocidos DEAD QUIET pero que sin duda no lo hicieron nada mal. Más jóvenes, más aguerridos y seguramente más locos que el actual JOHN GARCIA y sus actuales secuaces, pero unos dignos hijos putativos de sus mayores.

Canadienses, con miembros de ANCIIENST entre sus huestes y aún sin pulir, incluso algo rudos en maneras, sonido y propuesta, pero me parecieron una banda interesante. Impetuosos, cierto, algo nerviosos y aún sin tener claro si se quieren dedicar al Stoner/Sludge, al heavy metal o a propuestas algo más extremas, pero los de Kevin Keegan (cantante y guitarrista) nos dejaron buen sabor de boca.

Aún les falta, pero me da que la próxima vez les veremos ya maduros… tiempo al tiempo: “Setenteros” a la par que actuales, jóvenes pero con determinación y dos buenos discos a sus espaldas y una decente imagen transmitida en directo. No es poco…

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JOHN GARCIA:

John Garcia

Sin gran ceremonia, con una imagen casi más cercana a las rancheras que al rock, y con una interesante banda detrás, sus particulares compañeros de oro, aparecía JOHN GARCIA para rememorar mayormente su etapa con KYUSS… algo que, siendo deseado, no dejó de ser (casi) una sorpresa positiva. Hubo miradas a su actual nuevo trabajo, claro, pero el repertorio se centró en su mítica ex banda, tocando además no sólo clásicos o temas muy conocidos sino regalándonos alguna píldora diferente, de las que te dejan la boca sabrosa para muchos días.

Fuma, bebe líquido durante casi todo el concierto y se esfuerza por agradar, con la banda sonando y el público quizás que fue de menos a más en cuanto a la reacción que le suscitaba el concierto. Cierto es que no es lo mismo atacar “Conan Troutman” que “Kentuckyll” o clásicos rotundos como “Gardenia” o “El rodeo”. Y la banda suena potente, y solvente, pero obviamente no son Josh Homme y compañía, ni seguramente García sea el mismo ahora que entonces. ¿Autotributo? Tal vez, pero muy digno y con el protagonista de ídem, que no es moco de pavo.

Curioso, eso sí, que tuviera en Madrid mejor entrada que en Barcelona, siendo la primera tradicionalmente de gustos más clásicos, y la segunda más aperturista y favorable a “nuevas tendencias” (de los 90, pero “nuevas” entonces al fin y al cabo). Y que el respetable se animara poco a poco, despacio, pero acabara desmelenado y entregado, a ritmo de “Green machine”.

Y sin fumar, ni verde ni marrón, sin viajes de peyote ni hongos que valgan… e incluso sin dejar que la nostalgia fuera protagonista, íbamos llegando casi sin buscarlo al final.

Para los bises, inevitable pegarse un buen chute de “Supa Scoopa” aunque nos descolocara un poco acabar con una acústica en eléctrico como “Kylie”, más reciente y que pese a todo funcionó y nos redondeó una interesante noche viajando en el tiempo. Ya no están tan locos, ni tan colocados ni son tan peligrosos estos roqueros, pero aún nos hacen disfrutar y emocionarnos recordando cuando todos éramos más jóvenes. Benditos y malditos 90 que, viendo con perspectiva y tras un concierto remember algo trampeado, nos hace recordar que no todo estuvo perdido entonces. Ni ahora…

Texto: Fran Llorente (Madrid)

Fotos: Manu Damea (BCN)

P.D. – Que alguien nos explique la “coña” de los títulos acabados en “Ballz/s” del setlist, o serán sólo reminiscencias de los tiempos tóxicos. ¿Quién sabe?, pero ahí tenéis la foto para dar fe de que no me lo invento y que hubo pelotas incluso en ese sentido.

En este enlace podemos ver la galería completa de fotos de la noche, y también aquí debajo:

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