Que un grupo como DISTURBED no pise tu país en 16 años es algo que duele… pero también hace que las ansias crezcan dentro de tí como si fueras una niña pequeña cuando deciden volver. Y más aún si vienen acompañados por un grupazo como SKINDRED, que si no conocéis estáis tardando en escuchar.

DISTURBED + SKINDRED: Miércoles 18 de abril (sala La Riviera, Madrid) 

Comenzamos por los teloneros, y ahora nos metemos de lleno en DISTURBED…

Skindred

SKINDRED:

Cuando vas a un concierto de SKINDRED sales de el con un máster en control de masas. Es increíble ver como Benji Webbe, el vocalista, derrocha carisma (y algún que otro pique) con su público a ritmo de “ragga metal”, y cómo éste se deja engatusar y hace todo lo que él pide. Y sinceramente, en un concierto en el que ademas de algun tema nuevo nos sueltan sus bombas en forma de “Ninja”, “Pressure”, “Kill the Power” o “Nobody”, no podemos hacer otra cosa que obedecer. ¿Que te manda corear en “That’s my Jam”? Coreas. ¿Que te manda quitarte la camiseta y hacer un helicóptero en “Warning”? Pues lo haces.

Sinceramente, si tenéis oportunidad de verlos en directo no os los perdáis, porque son toda una experiencia para el público.

DISTURBED:

Pero vamos a lo que vamos, y lo que tenemos es muy gordo… ¡¡Primera vez de DISTURBED en España en 16 años!! El motivo fue la gira de su último álbum, “Evolution”, séptimo disco de la banda en el que lo que podemos escuchar, básicamente, es más DISTURBED. Si me preguntáis a mí os diré que, si no conoces su trabajo, no sabrás distinguir sus nuevos temas de todo su bagaje previo, lo cual no es en absoluto una crítica negativa. Ellos son un grupo que conoce muy bien su propio sonido y que no busca convertirse en otra cosa.

disturbed

El concierto comienza con “Are You Ready”, “Prayer”, “Vengeful” y “The Animal”, dejando claro que este concierto dará buena cuenta tanto de “Evolution” como de sus discos anteriores. Tras esto David Draiman lanza un saludo y un emotivo discurso sobre lo que para él significan estas dos horas de concierto, instándonos a desconectar de los problemas del mundo y a disfrutar de las personas que tenemos a nuestro alrededor.

Un inicio de concierto contundente, impecable en cuanto a sonido y luces pero que por contraparte se sintió flojo en cuanto a la actitud de un frontman que no parecía muy dispuesto a soltarse. “Stupify” enloquece a una sala repleta hasta los topes, y tras “Voices” y “Land of Confusion” llega un momento de calma, momento en el que un “Hold on to Memories” en acústico nos trae de vuelta caras conocidas como las de Kurt Cobain (NIRVANA) y Chris Cornell (SOUNDGARDEN) que son proyectadas detrás del batería.

Tras esto llega el momento de la parte rítmica para lucirse con un solo de bajo y otro de batería, dándonos pie para volver a la caña con “10.000 Fists” y “The Game” y dejando paso a la mitad más emotiva del concierto: “A Reason to Fight” y “Watch You Burn” enmarcadas por las palabras del vocalista sobre una de las peores enfermedades de nuestra era, la depresión (impactante el momento en el que pide que levanten la mano quienes la hayan sufrido y prácticamente toda la sala alza el brazo…).

Disturbed

Encarando ya el final del concierto se despliega una sección de cuerdas para su versión de “The Sound of Silence” (de SIMON & GARFUNKEL) y haciendo como que rematan con “Indestructible” e “Inside the Fire”… Pero obviamente un insaciable público no les permite irse a pesar de la hora y media de alternar entre toda la caña de la banda y sus más cuidados acústicos. Así que nos sueltan una gran traca final con “The Light”, “Striken”, “No More” y (no podía faltar) “Down With the Sickness” para terminar.

En definitiva, un gran directo que hace que los 16 años de espera no parezcan tan graves. Eso sí, con un apartado mejorable en cuanto a la espectacularidad, pero con un sobresaliente en cuanto a la ejecución y el sonido que hace que todo el mundo salga con la máxima satisfacción en sus caras. Y la sala hasta arriba, que no se nos olvide…

Texto: Paris Lakryma

Fotos: Raúl Blanco (RockAngels.com), ¡muchas gracias!