A veces se nos quedan crónicas en cola, y nunca lo ocultamos cuando ocurre, pero tratamos de recuperarlas y sacarlas a la luz lo antes posible… En este caso os hablamos de una de nuestras bandas favoritas, a la que vimos en directo una vez más hace pocas semanas. Os lo contamos: 

Y&T – Sala But, sábado 28 de septiembre de 2019

Y&T

Tiempo tardó Dave Meniketti en descubrir que en España sus Y&T eran una de las bandas más queridas y deseadas. Demasiados años que finalmente fueron superados por una presencia más o menos habitual durante la última década y que lleva a su grupo a girar con cierta frecuencia por la geografía nacional. Y dado que hacía tiempo de la última visita a Madrid la respuesta del público no se hizo esperar: un “sold out” como en las mejores tardes mostraba la gran expectativa por ver de nuevo a una de las mejores bandas de Hard Rock de la historia en la capital del España.

Se habló mucho de la posibilidad de que hubiera alguna banda que abriera el show pero finalmente Y&T iban a ser el único grupo en actuar sobre el escenario de la Sala But, algo que a la postre significaría que todos los asistentes estaban allí únicamente para corear canciones e himnos que han alcanzado ya su condición de atemporales. Y así, desde los primeros acordes de “Hurricane” cientos de personas comenzaban una gran fiesta que se iba a prolongar durante las casi dos horas que duraría el concierto.

En esta gira Meniketti ha decidido hacer un repaso a su extensa carrera y por ello, además de los hits habituales, el repaso de los temas que van cayendo según avanza el concierto recuerdan todos los discos, incluso aquellos menos populares. Eso significa necesariamente algunos parones en el clímax que generalmente se produce con las canciones más conocidas como “Don´t stop running” o “Black Tiger” pero en absoluto supone que se abandonen clásicos necesarios e imprescindibles como “I Believe in You”, “Summertime Girls”, “Rescue Me” o la más reciente “I´m Comming Home”. Y todo ello acompañado por la voz aterciopelada que Dave Meniketti sigue manteniendo… y por supuesto por su inmensa calidad como guitarrista. Una calidad que atesora desde hace décadas y que tal vez no ha sido valorada demasiado en su justa medida. Sin olvidar sus acompañantes, como John Nymann apoyándole en las seis cuerdas, el batería Mark Vanderhule y (el nuevo) Aaron Leigh como perfecto escudero en el bajo.

El concierto discurrió entre la nostalgia de aquellos tiempos en los que el grupo era capaz de llenar pabellones y la realidad de una sala pequeña repleta de nostalgia. Sala que sintió la emoción del propio cantante guitarrista cuando acabó retirándose unos metros para dejar caer visiblemente unas lágrimas ante la realidad de un público que siempre que tiene la oportunidad le demuestra que Y&T es una banda querida como pocas en nuestro país. Lógicamente llegaría el momento de cantar el gran himno ochentero “Forever”. De saltar, sonreír y, ¿por qué no?, recordar con el desconocido que bailaba al lado los miles de veces que aquel tema sonó en la vieja Canciller. Antiguos himnos de una época que pese a parecer difuminada en el tiempo se nos reaparece una y otra vez.

Y&T

Uno piensa a veces aquello de si cualquier tiempo pasado fue mejor. Seguramente sea tan solo un refrán, manido ya de tanto usarlo, pero de lo que no cabe duda es de que al apagarse las luces de un concierto de Y&T el regusto de haber vuelto a vivir un momento maravilloso queda, y perdura. Por muchos años, por siempre…

Texto: Fernando Checa (fernando@redhardnheavy.com) / Fotos: Ángeles Salmerón 

Vemos para cerrar la galería completa de fotos del concierto de Y&T en el anterior enlace o debajo en el slider: