Crónica del STEELFEST 2015 en Finlandia: metal extremo y exclusivo
STEELFEST 2015 – HYVINKÄÄ, Finlandia (viernes y sábado, 15-16 mayo)…
Está claro que el STEELFEST no es un Wacken, Graspop, Hellfest ni ninguna otra cosa por el estilo, ni tampoco creo que pretendan algo así. Llevan ya varios años limitando el aforo a 1.500 personas y ese aire de exclusividad, de festival familiar y único es precisamente lo que lo hace especial, amén de contar con un cartel que, sin estar a la altura de los más grandes (nuevamente, no es lo que buscan), siempre cuentan con nombres harto difíciles de ver en el panorama internacional.
Viernes 15 mayo: DARK FUNERAL + UNLEASHED + TEMNOZOR + DEMILICH + EVIL ANGEL + DIM AURA + MOR DAGOR + SATANIC WARMASTER + KETZER + AXEAGRESSOR.
El hecho de que la primera jornada de las dos que conforman el festival fuera un viernes hizo que yo, al igual que muchos, no pudiera estar en Hyvinkää a primera hora y me perdiera los primeros grupos del día, entre ellos SATANIC WARMASTER… Comenzaba la descarga de VORUM cuando por fin pude situarme frente al escenario principal, todo ello sin ningún tipo de agobio, algo que me gusta mucho de este festival, aunque sigo sin entender porqué frente a un escenario se podía beber y en el otro (éste) no. Cosas raras de Finlandia que por mucho tiempo que pase aquí jamás entenderé… Originarios de las islas Aland, practican una especie de death metal con mucha influencia del black, la estética de HORNA con el sonido de los polacos INFERNAL WAR, una mezcla curiosa pero que no me desagradó en absoluto, y contaron con más público del esperado por lo que creo que salieron contentos con su actuación.
Nos movimos sin mucho estrés al escenario interior para ver a los thrashers de Lahti, los incalificables EVIL ANGEL, y es que entre que sus canciones se parecían tanto entre sí que costaba diferenciarlas y ver a su vocalista “Orgasmatron” ataviado con un tanga de cuero y tachuelas, pasaron por allí con más pena que gloria. Tendrán su público, pero ese día no estaba allí.
Un poco de death metal añejo no hace daño a nadie, y prueba de ello fueron los resucitados para la ocasión DEMILICH, una de esas bandas legendarias que con tanto ir y venir nunca consiguen llegar a primera división pero que siempre permanecen en la memoria de todos los amantes del género. Los años no pasan el vano, eso está claro, pero pese a la edad y el estar algo oxidadillos dieron un espectáculo a la altura de lo que se esperaba de ellos, potencia y técnica, aunque un pésimo sonido deslució un poco su descarga restándoles fuerza y capacidad de transmitir esa técnica de la que siempre hicieron gala, aunque siempre es un placer poder ver a bandas como esta volver de entre los muertos.
Uno de los platos fuertes del cartel era sin duda la presencia de los rusos TEMNOZOR, banda difícil como pocas de ver en directo y que sin embargo fue la que atrajo seguidores de todos los rincones de Europa, haciendo que aunque parezca mentira, tras los locales y Alemanes, los españoles fuéramos los más numerosos parece ser.
Para muchos fueron los grandes triunfadores del festival, nos regalaron una descarga llena de misticismo, una puesta en escena excelente y en general un sonido perfecto… Pero fue llegados a este punto cuando mucho de los presentes dejaron claros sus motivos para venir desde diferentes puntos del continente por esta banda, y es que lo que comenzó con unos pocos saludos nazis y gritos de “Sieg Heil” acabo con gran parte de los presentes imitando a los primeros y al vocalista de la banda, envalentonado, pidiéndolos abiertamente. Para gustos los colores, descarga brillante, el resto que lo juzgue cada uno por sí mismo.
El listón quedó alto desde luego, pero si alguna banda del cartel podía con ello eran sin duda los UNLEASHED de Johnny Hedlund, una épica máquina de death metal que nunca hace prisioneros. He de decir que UNLEASHED eran una de mis bandas malditas, de esas que, pese a estar mi top personal, por una cosa u otra siempre se me escapaban en directo, así que la satisfacción era doble: tachar un nombre de mi lista y disfrutar de buen death metal… aunque una rotura en el isquiotibial izquierdo (el rugby no es sano) me impidió moshear como mandaba la ocasión.
Comentar que, pese a ser mediados de mayo ya, teníamos una inusual temperatura para las fechas de un par de grados bajo cero, con lo que eso de moshear que comentaba podría antojarse un tanto doloroso sin calentamiento previo… Para mi sorpresa y regocijo, aparte de sus momentos dedicados a su reciente y buen “Dawn of the nine”, centraron su descarga mayormente es su tremendo “Sworn allegiance”, haciendo que me desnucara vivo, por fortuna no había ningún bidé cerca… Bromas aparte, sobresalientes, y ojalá todas las veces que ves una banda por primera vez te dejaran semejante buen sabor de boca.
Cerraban el cartel, toda una institución del black metal pese a ser suecos: nada más y nada menos que DARK FUNERAL en una cita muy especial, que esa noche iban a interpretar de forma íntegra “The secret of the black arts” para celebrar su inminente vigésimo aniversario. Aunque parezca que el tiempo no pasa por las huestes de Lord Ahriman (único miembro original), llevan ya más de dos décadas en el negocio de la malignidad.
He de admitir que me sorprendieron en muchos aspectos. Por un lado, el sonido fue brutal, claro y fiel al original (aunque con la fuerza del directo, claro está) como pocas veces puede disfrutarse con bandas de black metal, y por el otro Heljarmadr me gustó mucho a la voz, sobrado de fuerza y potencia, clavó todos y cada uno de los temas de la noche, haciendo que, como ya me pasara la última vez que los vi y sin ser fan de la banda por nada en particular, disfrutara realmente con ellos. Y es que cuando unes entrega, buen sonido y presencia escénica, nada puede salir mal.
Y hasta aquí lo acontecido en la jornada del viernes, hora de tomarse unas cervezas pre-cama y mañana vuelta al ruedo…
Sábado 16 de mayo: NOKTURNAL MORTUM + ASPHYX + MOONSORROW + DEAD CONGREGATION + COSMIC CHURCH + KAWIR + SOTAJUMALA + WYRD + SARGEIST + TORTURE KILLER + SVARTTJERN + COPROLITH + WINTERFRONT
Llegó el sábado de forma soleada y algún que otro gradito más, algo de agradecer, porque lo cierto es que el día anterior con una simple sudadera las pase canutas para mantener el calor corporal. Nota mental: me tendré que comprar calcetines calefactables para la siguiente edición… y sí, aquí los venden, no era broma.
Me habría gustado tener el sisu suficiente para madrugar un poco, pero fue que no. Aproveché para descansar un poco y poder cargar las pilas, por lo que el primer concierto del día para mi fueron los contundentes TORTURE KILLER, banda antaño tributo a SIX FEET UNDER, que de hecho contaron con el mismísimo Chris Barnes a la voz para su segundo trabajo, “Swarn!”.
De entrada se notó a la perfección que el sonido había mejorado muchísimo en el escenario principal, pues el viernes fue un horror durante la mayor parte del día pero, por lo que estaba escuchando, todo problema había sido solventado y los de Turku pudieron machacarnos a base de bien con su corrosivo death metal pausado pero pesado. Siguen sonando un poco a SIX FEET UNDER, es inevitable puesto que es lo que les gusta, pero la brutalidad de cantante que se gastan y un mayor ritmo los diferencia ya de los maestros, demasiado influenciados por el rock.
De nuevo de vuelta al black metal de la mano de SARGEIST, uno de los grupos locales más internacionales en cuanto a este género y que conozco desde hace años, aunque también digo que les tenía la pista muy perdida debido a su irregular carrera, de hecho entre los indígenas corre el rumor de que solo consideran bueno uno de sus trabajos, y ni en cuál de ellos es se ponen de acuerdo. No fue mala su descarga pero, desde mi punto de vista y el de varios de los presentes, incluyendo varios músicos de otras bandas con los que deambulamos por el festival un rato, fueron demasiado monótonos y repetitivos. No pasara ese día a la historia como uno de los mejores de SARGEIST cuando menos.
SOTAJUMALA (Dios de la guerra en fines) iban a ser uno de los grupos de los que iba a escuchar algo por primera vez. De hecho, ya había escuchado mucho bueno de ellos y su death metal, y he de decir que no defraudaron en directo. Puede que el hecho de cantar en finés sea un hándicap muy importante a la hora de darse a conocer en el exterior, pero lo cierto es que cuentan con un directo brutal. Su vocalista, Mynni, es una bestia parda sobre las tablas, y consiguió meterse a los presentes en el bolsillo sin demasiado esfuerzo, de lo mejorcito del festival por lo que pude ver a posteriori.
WYRD eran sin duda una banda que no esperaba ver nunca en directo por una razón muy sencilla: me he pasado años pensando que lo habían dejado dado su largo periodo de inactividad que se remonta al 2009, año en el que editaron su último trabajo. Parece ser que el hecho de ser Hyvinkää ayudaba mucho a verlos de nuevo sobre las tablas. No sonaron mal por lo que pude ver, pero sí que se les nota un tanto oxidados, que mucho tiempo sin actuar siempre pasa factura, y eso que es un grupo que en su día escuché mucho. No fueron un desastre, pero mucho tienen que mejorar en directo si planean seguir con su actividad.
La verdad es que salvo de oídas no conocía demasiado a los griegos KAWIR, pero después de pasar un rato charlando y bebiendo con Panos, guitarrista y líder de la banda, nos animamos a pasarnos por el escenario exterior para ver su actuación, y de veras que no me arrepiento. Su personalísimo black metal me enganchó desde el primer momento, totalmente diferente a lo habitual que este género suele ofrecernos y gracias a su vertiente más pagana, pueden agradar a un abanico muy amplio de metalheads, su actuación estuvo por encima de la medía y nos regalaron unos minutos muy interesantes, los recomiendo encarecidamente a aquellos que no los conozcan.
De metal heleno iba la cosa y volvimos tras repostar a base de patatas y salchichas para disfrutar del death metal de DEAD CONGEGRATION, una banda que, a priori, solo conocía por encima pero que, como todo lo nuevo, despertaba curiosidad en mí. No voy a decir que me sorprendieran, pero demostraron tablas suficientes para estar por encima de muchos de sus compañeros de cartel, su estilo era bastante personal (como sucede con casi todos los grupos de la escena griega), lo suficiente para animarme a escucharlos con más detenimiento cuando tenga tiempo, apuntados quedan.
Uno de los nombres “gordos” del cartel era sin duda el de MOONSORROW, banda que he pasado de vérmelas y deseármelas para ver en directo a coincidir dos o tres veces al año (con lo cual puedo comparar y opinar mejor), y sinceramente, tenía muchas ganas de verlos sobre un escenario mayor dado que la última vez no acabaron de convencerme del todo. Pues bien, me alegra poder decir que está vez nos regalaron una actuación soberbia, ya sea por esa aura especial que se respira en este exclusivo festival o sencillamente por lo que hicieron mucho mejor que la última vez que los vi hace ya unos meses. Ahora bordaron todos y cada uno de los temas que nos regalaron, su actitud estuvo a la altura de sus mejores días, y en general, el sonido fue perfecto. Así es como se disfruta de MOONSORROW, y así es como se ganan nuevos fans.
Hablar de ASPHYX es casi de hablar de una leyenda del metal extremo, vamos a definirlos así, porque meterlos en el simple saco del death metal es quedarse cortos obviamente dadas su ramificaciones, sobre todo hacia el doom metal. Los de Martin Van Drunen congregaron a uno de los públicos más numerosos del festival frente al escenario principal como su estatus requería. Y no defraudaron, que su buen hacer y el buen rollo que Martin emana dejaron a todos con ganas demás… todo un frontman como pocos quedan y que en muchos casos son la mitad de una banda.
Hablar de NOKTURNAL MORTUM es hablar de polémica siempre, pero a su vez de espectáculo asegurado y de gente que quiere verlos sea como sea, entre los que me incluyo. Ya he perdido la cuenta de cuantas veces he intentado verlos en los últimos años y cuantas veces me he quedado con las ganas debido a cancelaciones por motivos varios y en ocasiones demasiado parecido que ni me voy a molestar en mencionar.
El escenario interior que, aunque no lo he dicho antes, fue bautizado hace ya tres ediciones con el nombre de “Jeff Hanneman stage”, difunto guitarrista de SLAYER, estaba lleno hasta la bandera para la ocasión, y es que, como ya he dicho, no es fácil ver a los ucranios sobre un escenario. No en vano ya cancelaron su fecha en el mismo festival el año pasado. Y como dijera Julio Cesar, “Vini, vidi, vinci”, que su actuación fue una mezcla perfecta de black metal, folk y ocultismo ancestral a partes iguales. Pueden gustarte o no, pero puedo asegurar que como espectáculo fue de lo mejor que se puede ver en estos estilos. Dinero bien invertido y en general, sonrisas de oreja a oreja; sólo espero no tener que esperar otra década de persecuciones por distintos países y escenarios para poder verlos de nuevo.
Broche de oro para un festival que no busca crecer de forma exponencial cada año sino mantener ese aura de exclusividad. No buscan convertirse en un festival de masas y perder el espíritu con el que empezaron como ha sucedido por ejemplo, y de manera flagrante, con el HELLFEST, antaño festival extremo y ahora reunión de freaks varios y más circo que festival. Aquí, sus plazas están limitadas año tras año (y al menos así piensan mantenerlo) a 1500 entradas, melena arriba, melena abajo. Quieren mantenerse como festival de culto sin grandes nombres del heavy metal sino grupos legendarios del metal extremo, ya que como festival extremo nació y como festival extremo quieren seguir.
Lo que hacen lo hacen por un sentimiento y no por dinero, y eso, amigos, a día de hoy es algo muy difícil de encontrar en el panorama metalero. Nos vemos el año que viene casi con total seguridad, ¡larga vida al STEELFEST!
Texto: Ángel Ruiz (angel@redhardnheavy.com)
Fotos: Tuulikki Vähäpullo